martes, 5 de marzo de 2013

Enlaces mentales que acaban en libros

Creo que voy a tener que buscar a Noé y a su arca porque está cayendo el diluvio universal… Y jo la que lleva Ikea que si las albóndigas que si ahora la tarta… he leído cinco artículos distintos sobre el tema de la tarta en periódicos digitales y en todos había errores garrafales sobre trazas de bacterias fecales, que si las enterobacterias estaban en semillas porque viven de forma natural allí… no he podido resistirlo y en un par de ellos he puesto un comentario… ups, esto ya es un paso más en mi deformación profesional…

Esto me hace recordar una novela  de Robin Cook sobre unas hamburguesas con E. coli O157:H7. Se llama Toxina y es de finales de los noventa. Tenía la versión sudamericana y me resultaba chocante el vocabulario mezclando inglés y español, pero lo que me hacía gracia era que se lo dedicaba a aquellos que sufrieron el flagelo de la toxina o algo así… resulta entretenido y sigue el estilo de todas sus novelas…

Total que yo no quería escribir sobre esto pero una cosa me lleva a la otra y de la otra como no, acabo hablando de libros… así que hoy entrada cortita y ya mañana si eso escribo sobre lo que tenía inicialmente en mente…

Feliz Cincomarzada a los maños… los recortes vacacionales hacen que no vaya a celebrar el cumple paterno… espero que mi madre se apiade y me congele sus ricos canelones… aunque nosotros lo hemos celebrado con sopita ricadesuegra y un solomillo glaseado a la cerveza negra que aunque tengo que perfeccionarlo para ser la primera vez no estaba mal (o que lo desmienta La Rubia, si se atreve).

Me toca buscar lectura nueva… ayer cayó un dramón titulado “La habitación” contado desde la percepción de un niño de 5 años… uf… tengo pendiente uno con un título superchulo, algo así como “alguna vez todo este dolor te será útil” pero no me veo con ánimos de enlazar un drama con otro… buscaré algo de aventuras que no me apetece darle al coco…

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